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Castelao se convierte en el primer autor gallego con su obra protegida. La Xunta declara su legado Bien de Interés Cultural de carácter inmaterial

El ilustre rianxeiro Alfonso Daniel Rodríguez Castelao (1886-1950) se convirtió ayer en el primer gallego que va a tener protegida legalmente su obra en conjunto, desde la plástica a la literaria, pasando por la epistolar, hoy dispersa entre varios archivos, museos e instituciones de Galicia, Europa y América. La decisión la tomó ayer la Xunta al declarar Bien de Interés Cultural (BIC) de carácter inmaterial todo el legado del autor de Sempre en Galiza, lo que va a garantizar, en palabras del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, la «conservación, difusión e investigación» de toda su obra para las generaciones futuras.

La de Castelao es, además, la primera declaración BIC inmaterial que se aprueba en Galicia y que por muy pocos días cae dentro del año en el que se conmemora el 125.º aniversario de su nacimiento. Feijoo destacó al término de la reunión del Consello que esta distinción «vén a blindar» no solo la conservación material de la obra plástica y literaria del rianxeiro, sino también la difusión que de ella se haga o incluso las labores de investigación. Lo que permite la declaración que recae sobre la figura de Castelao es «recoñecer o seu valor», dijo Feijoo, dentro del patrimonio cultural de Galicia, reconociéndolo además como «unha das figuras máis importantes da nosa cultura».

La mayor parte del legado de Castelao está catalogado, en virtud al convenio elaborado firmado en el 2008 entre la Xunta y la Fundación Castelao, que permitió crear una base digital de datos que tiene más de 3.000 registros. El catálogo sigue completándose de manera progresiva. Instituciones como el Museo de Pontevedra, el Provincial de Lugo, el Quiñones de León de Vigo, el Belas Artes de A Coruña o el Museo do Pobo Galego son los que acaparan en Galicia la mayor parte de la obra de Castelao, así como la Real Academia Galega, Novacaixagalicia, la Universidade de Santiago de Compostela, la Fundación Penzol, la Fundación Vicente Risco o incluso el BBVA. Otra parte importante de su obra se sitúa en Buenos Aires, donde Castelao falleció en 1950.

Domingos Sampedro, La Voz de Galicia