La portavoz de Izquierda Unida en la comisión de investigación de los ERE ha protagonizado severos interrogatorios a los comparecientes. Y avisa: "Por los 30 años anteriores, que nadie nos pida responsabilidades"
Tiene entre manos una de las patatas calientes del otoño parlamentario. Alba Doblas (Córdoba, 1971) y su grupo de IU elaboran estos días las conclusiones de la comisión sobre los ERE, que oscilarán entre los extremos del PSOE y PP. Eso sí, los interrogatorios han dejado clara su severa censura al procedimiento seguido por la Junta para otorgar 647 millones en subvenciones entre 2001 y 2010.
- Todas las miradas están pendientes de IU.
- Hay unas expectativas que son una presión añadida. Me sorprende mucho que no se tenga expectativas con el PP, que había rectificado su criterio sobre la comisión y ahora ha vuelto a decir que no sirve para nada y que es un paripé. Nos gusta ese papel de garantes de la transparencia que tenemos que mantener. Lo que no es lógico es la duda. Ahora no vamos a cambiar.
- ¿Para qué ha servido la comisión?
- Primero para demostrar que en democracia existen instrumentos de control del Gobierno y de transparencia ante la opinión pública importantísimos para que el pueblo elija con todas las garantías. Que el pueblo decida, pero solo cuando tiene toda la información sobre la mesa. Si esa información se oculta o se manipula, el pueblo ya no está decidiendo sobre la verdad.
- ¿Dónde sitúa las responsabilidades políticas tras lo oído?
- No puedo situar responsabilidades políticas en tanto no concluyamos los trabajos. Determinadas afirmaciones deben aparecer sustentadas sobre el papel. Adelantar unas responsabilidades es una temeridad y un peligro, porque te puedes quedar corto o ir más allá de lo que nos corresponde. El papel de la comisión es el ámbito de lo político y no de lo penal.
- Algunos exconsejeros han achacado las culpas a Empleo.
- Todo tiene su valor, pero el hecho de que un testigo inculpe a otro ¿tiene mucho valor?
- Los exconsejeros Antonio Fernández y José Antonio Viera eran los jefes de directos de Guerrero ¿Tienen responsabilidad?
- (Silencio) Vamos a ver. Todo depende. Hay una responsabilidad política in eligendo, in vigilando y también una responsabilidad política por acción propia. Hay que determinar el grado de responsabilidad dentro de esos parámetros. El grado de conocimiento también determina un grado de responsabilidad.
- Se avecina una negociación muy dura con el PSOE.
- Nosotros no negociamos sobre la comisión. La sacamos de cualquier negociación, esto queda aparte porque no nos comprometemos con las acciones de Gobiernos anteriores, sino con nuestro Gobierno. Por los 30 años anteriores, que nadie nos pida responsabilidades, están fuera de cualquier negociación.
- La juez Alaya ha insinuado cierta responsabilidad por parte de la Consejería de Economía al no hacer que prosperen los informes de la Intervención.
- No descarto nada. Me preocupa esa Intervención, a medio camino entre órgano administrativo y alto cargo. Tenía el rango de dirección general, ahora tiene el rango de viceconsejero. No es un funcionario. ¿Tiene responsabilidad política o simplemente funcionarial?
- ¿Cómo juzga su papel?
- Hay que tener en cuenta que existen interventores delegados en cada consejería y la labor de control de las empresas públicas. El interventor general está por encima de todos ellos y tiene el análisis de uno y otro. ¿Por qué es necesario un informe especial? ¿Para qué está por encima de todo eso?
- ¿Cuál ha sido la mayor decepción de la comisión?
- Que no se haya dado una explicación completa sobre el qué, el cómo y el porqué.
- ¿Debe responder la consejera Aguayo por no alertar de los informes de la Intervención?
- Cuando algo llega a una consejería, llega. Aquí no hay como en los correos electrónicos avíseme usted de que ha sido leído. La recepción tiene que seguir unos cauces legales y normales. No me vale la excusa, no es válida. Hay que responder por qué no se ha llevado el cauce normal de la eficiencia del gasto público. Pero adelantar responsabilidad es una irresponsabilidad. Aquí ha pasado algo muy gordo y viene determinada por una manera de gobernar durante 30 años. Hay una responsabilidad en el modo en la que se ejerce el Gobierno. No voy a descubrir la pólvora.
Javier Martín-Arroyo, El País