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Solalinde: Ulises Ruiz actualmente tiene escuadrones de la muerte en Oaxaca

Indignado por la impunidad que el Estado mexicano ofrece a Ulises Ruiz, el sacerdote Alejandro Solalinde advierte que en Oaxaca el ex gobernador sigue operando "escuadrones de la muerte".

Ulises Ruiz “sigue teniendo poder y tiene escuadrones de la muerte; sigue manejando grupos de policías que controlan todo y lo hacen ‘limpiamente’, sin dejar huella”, afirma en entrevista con La Jornada.

Solalinde, que encabezó la Comisión de la Verdad en Oaxaca, para investigar la represión ocurida en 2006, lamentó que la misma haya sido una "simulación" del Estado.
"La Comisión de la Verdad entregó resultados, pero tal parece que en México no pasa nada. Hay un cinismo de parte de los políticos y también una impunidad del sistema, una cobertura, una complicidad."

Hace cuatro meses entregó las recomendaciones del informe titulado Ya sabemos. No más impunidad en Oaxaca, que documenta las violaciones de derechos humanos cometidas en 2006 y 2007 durante el conflicto sociopolítico que se registró en ese estado.

"Lamentablemente nuestras recomendaciones no se han cumplido, cayeron en tierra de nadie, como si nunca hubieran existido. El Estado mexicano es un Estado cínico e impune. El mismo PAN en su momento cubrió a Ulises Ruiz, pero ya no importa si es ese partido, el PRI o el que sea; la impunidad es sistémica y se tiene que cumplir como una norma implícita".

La Comisión de la Verdad comenzó su trabajo en septiembre de 2014, de acuerdo con el decreto legislativo 2056, el cual destinaba 18 millones 173 mil pesos de presupuesto, pero el sacerdote dice que el mismo gobierno boicoteó su trabajo.

"Nos quitaron las dos terceras partes del presupuesto antes de finalizar; incluso el gobierno de Gabino Cué le quedó debiendo un mes de trabajo a la comisión, gente que iba de 10 de la mañana a 10 de la noche, incluidos sábados y domingos. Él no pudo decirnos ni ponernos una censura, ni una línea, porque no lo íbamos a aceptar, pero tampoco tuvimos el apoyo necesario. Nos quitaron mucha fuerza y tuvimos menos casos de los que debimos tener."

- Sin acceso a la justicia.

La comisión identificó a 38 perpetradores de violaciones graves a los derechos humanos en Oaxaca: ejecuciones extrajudiciales, torturas y desapariciones forzadas, pero ninguno ha sido castigado y, lo que es peor, la mayoría siguen ocupando puestos en la administración estatal.

“Los 38 perpetradores se mantienen en la impunidad. Por ejemplo, Daniel Camarena Flores sigue en su puesto de inspector en el municipio de Oaxaca, como si nada hubiese pasado, y otros más que incluso fueron candidatos a puestos de elección popular.

"Los que antes eran perpetradores ahora se visten con corbatita y están en funciones públicas", asegura.

Añade: "hay sólo dos órdenes de aprehensión por las ejecuciones extrajudiciales, pero los demás que las cometieron andan como si nada; todo es una total impunidad. No investigan los casos, hay muchas cosas que se tienen que hacer y no se han hecho. El informe de la Comisión de la Verdad cayó en la impunidad".

Solalinde, que ha vivido 34 años en Oaxaca, explica que el mayor "perpetrador" es precisamente “Ulises Ruiz, quien debería estar en la cárcel. Si de verdad hubiera justicia, también se deberían de investigar todas sus finanzas.

“Las víctimas refieren que él tuvo que ver en ejecuciones extrajudiciales, desaparición de personas y torturas. Ruiz siempre aparece como el principal perpetrador. En Oaxaca era el máximo poder para mover y controlar todo. Nadie hacía nada sin él.

"Finalmente, como era el autor intelectual de todo, fueron asesinando a las personas que podían echarlo de cabeza. Hay testimonios y pruebas."

De acuerdo con las investigaciones de la Comisión de la Verdad, integrada por 23 personas, “el mismo gobierno de Ulises Ruiz fue matando a perpetradores que cometieron crímenes; fueron bastantes ejecutados, los más importantes, comandantes y directores de seguridad pública.

“Los fueron asesinando para que no hablaran. Lo manejaban como ejecuciones o ‘ajustes de cuentas’, y como ellos tenían en sus manos la Procuraduría de Justicia estatal, hacían lo que se les pegaba la gana.”

Sin embargo, dice Solalinde, el sistema político "asegura" impunidad al ex gobernador: "nadie lo molesta ni lo incomoda, porque se blindó. Él se blindó en el Congreso y ante la justicia. Aprovechó bien el sistema para protegerse. Ahora que entre Alejandro Murat será igual, porque nunca va a hacer justicia".

Lo peor, señala, es que las víctimas siguen esperando justicia y reparación del daño. “No hubo acceso a la justicia para las víctimas ni van a hacer caso a las recomendaciones. Una vez más quedan las víctimas y la sociedad oaxaqueña lastimadas y agraviadas.

“Y hay un agravio más: la vuelta del PRI al gobierno de Oaxaca. Ese mismo partido que los laceró, los asesinó y que hizo todo, ahora vuelve. Es como si volviera Ulises Ruiz, aunque son personas distintas, pero es el tricolor, es el sistema. Ya vimos con Gabino Cué que dio lo mismo que fuera de un partido o del otro... las cosas siguieron igual.”

Aunque el gobierno de Oaxaca hizo algunas reparaciones del daño a las víctimas, muchas quedaron pendientes. Por tanto, el sacerdote exige que se les atienda: "las 23 personas de la comisón no nos vendimos, tratamos de hacer el trabajo como era, pero hasta nuestro alcance, porque estuvimos siempre limitados por la cuestión económica y acosados por el PRI".

Durante dos años, Alejandro Solalinde escuchó los testimonios de las víctimas. "Me dolió, sufrí muchísimo al estar escuchando horas y horas a las víctimas; me sentí sumamente impotente, me llené de rabia y de saber que esas personas que habían amenazado, encarcelado, golpeado, torturado y asesinados, todavía siguen allí".

Añade: "Hubo una persona que trabajaba en la Procuraduría General de Justicia de Oaxaca, nos dijo que aquí habían traído a los del EPR (Ejército Popular Revolucionario) todos golpeados, torturados, luego vio cómo se los llevaron casi muertos a Los Pinos para torturarlos más y después los desaparecieron. Esta persona tenía pruebas de todo, incluso videos, y no los sacó por miedo, porque los perpetradores seguían allí trabajando".

El sacerdote reitera: “Ulises Ruiz es lo peor que ha tenido Oaxaca, lo más cínico y también lo más peligroso. Ulises Ruiz es un baluarte del PRI, es el paradigma del clásico cacique. No hay que olvidar que su familia de Chalcatongo es caciquil y el tricolor ha manejado todo el estado con base en caciques. Tiene una fortuna mal habida: él ha sabido cubrir todo lo que tiene, como el hospital que maneja su esposa, por ejemplo. Cómo va a justificar eso, si todos vimos cómo él desvió los fondos; hay equipo médico muy costoso que simplemente desapareció”.

Inexplicablemente, dice, el PRI volvió a ganar. “Los oaxaqueños están empobrecidos porque quieren, por dejados, ya que se han tragado toda esta pastillota del tricolor. Pudieron haber cambiado la historia, pero ni siquiera levantaron la cara con Gabino Cué. Ahora viene más de lo mismo”.

– ¿Qué espera del gobierno de Alejandro Murat?

– Nada, por supuesto que nada.

Sin embargo, le recomienda generar cambios: "primero lo que se necesita es que de veras entre a gobernar, porque a lo mejor no lo dejan. Su gobierno no va a ser fácil. El PRI está agonizando, va en picada, en decadencia. No sólo ellos, sino todo el sistema, el priato donde está el PAN, el PRD, el Verde; todos van en conjunto. Son lo mismo, todos ellos van para abajo".

Solalinde critica al gobierno actual: "Enrique Peña Nieto va a terminar muy mal. El PRI ya está herido de muerte, pero esperamos un cambio en 2018, con una persona que sí garantice el cambio y no sea más de lo mismo. No hay que olvidar que este es un gobierno parásito que vive a costa de los migrantes, ya ni del petróleo ni de las exportaciones, sino a costa de los pobres migrantes".

(Sanjuana Martínez, La Jornada)