Tras el resultado del debate interno del colectivo
No faltaron algunos reproches habituales, pero desde el Gobierno de Lakua a Sortu pasando incluso por el PP vasco se asume que la decisión de EPPK de afrontar la vía legal para las excarcelaciones abre un nuevo contexto. Lakua ve inaplazable cambiar la política carcelaria, el PNV habla de apoyar avances, y Sortu, de una hoja de ruta conjunta
Con tonos y matices muy diversos, pero esta vez el anuncio de EPPK del resultado de su debate y votación interna ha concitado auténtica unanimidad en el arco político vasco. En torno a tres pautas: se trata de una noticia positiva, cambia el escenario conocido hasta ahora y allana el camino a abordar ya otra política carcelaria y con las excarcelaciones en el horizonte.
Pese a que el silencio del Gobierno español (y el del resto de portavoces políticos estatales) fue total, la propia parlamentaria del PP en Gasteiz Laura Garrido asumió en la tertulia de ‘‘El Parlamento en las ondas’’ de Radio Euskadi que el paso abre la puerta a normalizar medidas como la concesión de beneficios penitenciarios: «Siempre han estado ahí –sostuvo–, y si no se han aplicado es por el veto que ha ejercido ETA sobre sus propios presos».
En una comparecencia urgente, el secretario de Derechos Humanos del Gobierno de Lakua, Jonan Fernández, saludó que la decisión de EPPK «avanza en la creación de este contexto favorable para el cambio de la política penitenciaria también por parte del Gobierno español». Habla de «cambio sustancial en las expectativas», recordando también el desarme de ETA materializado el 8 de abril, y califica de «impostergable» un cambio en la política penitenciaria, que cree que Madrid debe abordar con Lakua. «Como primer paso, debe contemplar el acercamiento de las personas presas a prisiones cercanas a su entorno familiar y atender prioritariamente a las problemáticas de mayor incidencia humanitaria».
Fernández añadió otra perspectiva: la de las excarcelaciones. Indicó a los presos que «es preciso ahora pasar de las palabras a los hechos» con «pasos que no vuelvan a demorarse años», y aquí añadió: «Desde el punto de vista legal el acercamiento no requiere de cumplimiento de condición previa. Sin embargo, las vías legales e individuales para la progresión de grados y la resocialización requieren un reconocimiento crítico del daño causado».
- Respaldar su desarrollo.
Siguiendo con el PNV, la parlamentaria Josune Gorospe dijo también en Radio Euskadi que el resultado del debate interno (87% de participación y solo 14% de noes) «es un paso positivo». Añadió a ello que, a partir de ahora, «las personas presas necesitan que se les acompañe y oriente desde el derecho penitenciario, y se requiere también que se distancien de los delitos cometidos y hagan una reflexión crítica, en la que su entorno político también les pueda acompañar. Que no se pierda más tiempo», pidió al igual que Jonan Fernández.
Desde la comisión de Sortu por los presos y presas, también en rueda de prensa urgente, Oihana Garmendia y Antton Lopez incidieron igualmente en plantear sinergias. Creen que este resultado «pone las bases para poder diseñar una hoja de ruta conjunta entre EPPK, las instituciones, los agentes políticos y la sociedad vasca».
«El Colectivo necesita el acompañamiento de la sociedad para desarrollar toda la potencialidad de la legislación penitenciaria ordinaria y denunciar la aplicación de las leyes de excepción», añadieron. Y como primera pauta, «es necesario llegar a un consenso para solucionar cuanto antes los casos que exigen urgencia. Aplicando el principio de humanidad y la legislación internacional sobre derechos humanos, exigimos que las presas y presos gravemente enfermos sean puestos en libertad cuando antes porque sus vidas corren peligro y se acabe con la dispersión», así como que todos los encarcelados sean repatriados.
Sortu entiende que con la aprobación de este documento «el Colectivo levanta la mirada de los patios para tener una referencia amplia de la sociedad vasca» y destaca que ha adoptado su decisión con una participación mayor que nunca, con 91 aportaciones que dan fe de la magnitud del debate y con un porcentaje de apoyo (73,4% de síes) que constituye «un aval indiscutible».
Por parte de EH Bildu, tras saludarlo como «gran paso», el parlamentario Julen Arzuaga incidió asimismo en la necesidad de dinámicas conjuntas, por ejemplo en la Cámara de Gasteiz: «Hemos estado trabajando por los presos enfermos y contra la dispersión, y ahora vamos a tener que hablar de, con la ley en la mano, cómo hacemos para vaciar las cárceles».
- Elkarrekin Podemos y PSE.
La sintonía de criterio en la valoración alcanzó al resto de fuerzas políticas vascas. Así, desde Elkarrekin Podemos el portavoz parlamentario Lander Martínez expuso que «la valoración es positiva, porque se quita un candado que han tenido estas personas durante mucho tiempo y que les hacía sufrir».
En cuanto al PSE, José Antonio Pastor acusó a ETA de «imponer una doble condena al impedir a estos presos acogerse a medidas individuales», pero en cualquier caso cree también que el resultado de esta votación «es positivo» y «una buena noticia».
En el capítulo de críticas, varios partidos reiteraron argumentos clásicos como que la decisión de EPPK debió producirse tiempo atrás y que se ha despreciado la opción que veían abierta ya con la «vía Nanclares».
- Valoraciones: instituciones y partidos vascos.
«Si los beneficios penitenciarios no se han aplicado hasta ahora es por el veto que ha ejercido ETA» (Laura Garrido, PP)
«Se ponen las bases de una hoja de ruta conjunta entre EPPK, instituciones, agentes políticos y sociedad vasca» (Oihana Garmendia y Antton López, Sortu)
«Las personas presas necesitan ahora que se les acompañe y oriente desde el derecho penitenciario» (Josune Gorospe, PNV)
«Tras el cese definitivo de 2011 y el desarme del 8 de abril, esto confirma un cambio sustancial» (Jonan Fernández, Gobierno de Lakua)
(R. S., Gara)
