Secretario regional del PSOE de Navarra. Es el único líder territorial que ha firmado el 'Manifiesto de los 30'.
"Entrar en el debate de personas es prostituir el debate de ideas".
A poco más de un mes para el Congreso Federal del PSOE y en medio de una batalla sobre el pasado y el futuro del partido a cuenta del manifiesto 'Mucho PSOE por hacer' y el artículo 'Yo sí estuve allí', el secretario regional del PSN-PSOE, Roberto Jiménez (Tafalla, Navarra, 1973), insiste en que es tiempo de ideas y no de candidatos. Como firmante del primer documento -es el único líder regional que lo ha apoyado- subraya que hay que hacer autocrítica "sin buscar culpables". Y aclara que ellos "también estuvieron allí para lo bueno y para lo malo".
- ¿Toca ya que los aspirantes a liderar el PSOE den un paso?
- Más que de personas, me preocupa que empecemos a analizar qué nos ha ocurrido, por qué hemos llegado a esto y, sobre todo, cuáles son las soluciones que podemos aportar para que la sociedad crea en nuestro proyecto. Todo esto desde una posición de integración. Estoy convencido de que este país es progresista, pero tenemos que escuchar a esa mayoría que quiere que seamos progresistas.
- Es uno de los firmantes del manifiesto 'Mucho PSOE por hacer'. ¿Es un documento de apoyo a Carme Chacón?
- No, estamos un montón de gente que queremos fomentar el debate de ideas, que es lo verdaderamente importante y necesario. Chacón ni siquiera ha dicho si va a presentarse.
- ¿Cree que el artículo 'Yo estuve allí', firmado por ex secretarios de Estado, va contra ustedes?
- 'Mucho PSOE por hacer' es un documento autocrítico con lo que ha ocurrido, que dice claramente que la responsabilidad es compartida por el conjunto del socialismo. Ha habido errores y también muchos aciertos. Pueden ser documentos concurrentes. Nosotros también estuvimos allí para lo bueno y para lo malo y reivindicamos al presidente Zapatero, como también a González. No tenemos de qué avergonzarnos, pero sí ser valientes para decir en qué nos hemos equivocado, con intención de corregir los errores.
- De los posibles aspirantes, Rubalcaba y Chacón, ¿de quién está usted más próximo?
- Ideas, ideas e ideas... Los dos son estupendísimos. Entrar en el debate de personas es prostituir el debate de las ideas al centrarnos en nombres. Esta no es una cuestión de personalismos.
- ¿Qué debate defiende?
- Defiendo un debate abierto, participativo y sincero entre toda la militancia. El documento pretende fomentar la participación para analizar las causas y dibujar el futuro. El partido no tiene que reinventarse ni dar grandes volantazos, sino volver a ser auténtico con las señas de identidad del PSOE: progresista, de izquierdas, conectado con la sociedad, con los sindicatos y con los movimientos sociales. También debemos adaptarnos a las nuevas realidades sobre la participación, primero internamente y luego con la sociedad. En el ámbito económico, la socialdemocracia tiene que ser capaz de generar riqueza y luego de saber redistribuirla -ahí las políticas fiscales juegan un papel importantísimo- y también mantener los pilares del Estado del bienestar.
- ¿En qué se ha equivocado el PSOE?
- La crisis fue un problema muy grave, pero no todo es imputable a la crisis. Creo que desde hace algún tiempo nos apartamos de la sociedad tomando medidas que eran difícilmente entendibles desde una perspectiva socialdemócrata. Pedimos esfuerzos a la ciudadanía que no fueron equitativos y perdimos parte de nuestras esencias, no llamamos a las cosas por su nombre. Fue un error colectivo. No se trata de buscar culpables.
- ¿No cree que coaliciones como la del PSN con UPN, una formación conservadora, desmotivan a los militantes y al electorado?
- En Navarra ha primado la fuerza de la aritmética. Hacer un Gobierno alternativo suponía sumar si u ocho partidos y teniendo en cuenta las circunstancias, con lo que era Bildu en ese momento (ETA no había anunciado el fin de la violencia), la aritmética nos obligaba a hacer esto. Si no, creo que hubiéramos ido a repetir las elecciones. Esto no nos lo podíamos permitir. Evidentemente, en el seno del Gobierno navarro hay dos sensibilidades y dos ideologías distintas, pero creo que en estos momentos no hay otra posibilidad.
- ¿Los candidatos y los secretarios generales deben ser elegidos por los militantes y simpatizantes?
- Es una posibilidad que habría que observar con buenos ojos. Para la elección del secretario general sería positivo tener en cuenta a la militancia y para la del candidato a la Presidencia del Gobierno o a una alcaldía no estaría mal abrirla a los simpatizantes.
- ¿No se ha quedado el PSOE un poco dormido?
- Este mismo debate se suscitó en 1996. Si hubiésemos ganado nadie estaría hablando de esto. La política tiene mucho de anímico. Cuando las cosas no van bien nos cuesta más participar y debatir. Es verdad que, quizá, la estructura que tiene el partido no ha funcionado muy bien, pero tampoco se trata de decir que es malísima. No puede ser que fuera buena hace cuatro años y ahora tan mala, pero hay que se autocrítico para mejorar las cosas.
- ¿Le parece acertada la "oposición positiva" que inauguró Rubalcaba?
- En la genética del PSOE está hacer una oposición que se caracteriza por la palabra responsabilidad, distinta a la oposición cavernícola que tradicionalmente hace la derecha. Los socialistas anteponemos los intereses generales del país a los del partido.
- Ha pedido democracia, libertad y respeto fraternal en el Congreso. ¿Teme navajazos?
- Espero y deseo que no, que tengamos altura de miras. Una cosa es que haya debate y otra es llevarlo al conmigo o contra mí. Formamos todos parte de un mismo equipo. Tenemos que tener un espíritu inclusivo. Siempre he dicho que herida que abramos, herida que luego vamos a tener que cerrar. Por eso, mejor no abrirlas. Vamos a ser capaces de debatir con vehemencia, con fuerza, con ganas y respeto. No voy a incurrir en prácticas de esa naturaleza.
- ¿En Navarra habrá una posición unitaria?
- Es un partido como el conjunto del PSOE donde la gente tiene ganas de participar y las opiniones son diversas en un colectivo amplio. Lo que hay que tener es capacidad de aglutinar, de saber sumar, ser inclusivos. Es momento de la militancia, no del aparato. Una cosa es liderar la participación y otra tutelarla.
- ¿Le gustaría estar en la próxima ejecutiva del PSOE?
- No me lo he planteado. Tengo mucho trabajo aquí en Navarra, al frente de una Consejería que antes eran dos.
Carolina Martín, Público