La Misión de Supervisión de Naciones Unidas en Siria (UNSMIS) ha podido constatar que la ofensiva del pasado jueves contra la localidad de Tremseh tenía como objetivo principal a los desertores del Ejército y a activistas de la oposición.
El equipo de observadores de la UNSMIS ha podido comprobar que en ataque, en el que murieron más de 200 personas, se empleó un amplio repertorio de armamento, como artillería y morteros, ha explicado un portavoz de la misión internacional.
Los observadores lograron entrar en Tremseh el sábado y pudieron comprobar de primera mano que hay casas dañadas y un colegio quemado. Mañana domingo los observadores volverán a la localidad, ha informado un portavoz de la UNSMIS, que sin embargo ha señalado que por el momento la cifra de víctimas mortales por el ataque aún no está clara.Reuters, Europa Press