El paciente está con un bajo nivel de conciencia y los médicos temen un desenlace fatal
García Viejo, el misionero español ingresado desde el pasado domingo en el hospital Carlos III de Madrid por el virus del ébola, está sufriendo un empeoramiento generalizado y tiene una intensa afectación hepatica y renal. Según ha podido saber ABC, el paciente está con un bajo nivel de conciencia y se teme un desenlace fatal. García Viejo, incluso, no ha recibido tratamiento experimental por su estado crítico de salud.
«Se monitorizan las constantes vitales como la presión, temperatura...». La confirmación de que tenía el virus se tuvo el sábado, un día antes de ser repatriado, pero ya desde inicios de la semana pasado empezó a mostrar los primeros síntomas.
El hospital en el que trabajaba García Viejo en Lunsar (Sierra Leona) fue clausurado como medida «preventiva y temporal».
(J. G. Stegmann, ABC)