Más de 11.000 entradas y 1.050.000 visitantes desde el 9 de octubre de 2011

Rafael Nadal y Marc López logran el oro en dobles

Sueño completo para Marc López. Doblete de oro olímpico para Rafa Nadal, tras su título individual en Pekín 2008. Anoche el catalán y el balear coronaron su excelente torneo ganando la final por parejas ante los rumanos Florin Mergea y Horia Tecau por 6-2, 3-6, 6-4 en 2 horas y 26 minutos en lo que supone la primera vez que un tándem español sube a lo más alto del podio. Un partido vibrante conquistado por Nadal y López, que actuaron con una chispa fenomenal, con una compenetración envidiable y con un desempeño basado en la inspiración contra unos adversarios duros y batalladores, aunque no brillen en el circuito individual.

Dos horas después de batir a Bellucci en individuales, Nadal retornaba a la pista todavía sediento de victorias. Insaciable, el balear no comenzó al ralentí como otras veces, sino que siguió a la perfección la batuta que le marcaba López, su guía espiritual y real en el doble. Marc se cruzaba con criterio, voleaba de manera impecable, lanzaba globos a las esquinas y apenas fallaba. Los rumanos, expertos en dobles pero cada uno con una pareja distinta, buscaban al catalán pensando que era el flanco débil pero se encontraban con respuestas contundentes. Así que el primer set resultó un paseo militar de apenas 33 minutos. Parecía que el partido iba a toda vela y que la función bajaría el telón pronto y sin sobresaltos. Pero la réplica de los rumanos fue inmediata y expeditiva. Mergea comenzó a golpear desde el fondo con fuerza y engañando con sus tiros a Nadal y López mientras Tecau ganaba la red y se convertía en un frontón que remataba todo lo que se movía. Así que rápidamente cogieron ventaja en la manga y se marcharon 4-1. Nadal y López salvaron dos bolas de set en el octavo juego y con 5-3 gozaron de tres pelotas de break para reaccionar. Pero no las aprovecharon y un smash de Tecau estableció el 6-3.

Se abría una nueva final, la que decidiría el título. Pudo caer de cualquier lado porque los españoles gozaron de hasta cinco pelotas de rotura en un juego eterno, el cuarto. Pero no las aprovecharon y desperdiciaron la ocasión de escaparse 3-1. En cambio con 3-3 los rumanos quebraron en blanco el servicio de Marc López. Parecía que todo estaba perdido pero la pareja española se recuperó enseguida y completó una recta final de partido excelente. Al acabar ambos jugadores se tiraron al suelo para celebrar el título.
Esta es la historia de una medalla de oro que nace en Pedralbes, concretamente en las pistas del RCT Barcelona, el club del mundo con más tenistas entre los 100 mejores del ranking. Allí, en la casa del Trofeo Godó, se forjó una amistad. Allí se conocieron cuando eran dos chavales Rafa Nadal y Marc López (34 años), una de las mejores personas que se pueden encontrar en el mundo del tenis, que jugaba junto al balear la final de dobles al cierre de esta edición. Cuando más de uno y más de dos jugadores le consideran su amigo más querido es que algo tendrá la personalidad de López, el socio de todos dentro de una pista y también fuera.

Dentro, Nadal y López llevan compartiendo sueños desde que jugaban campeonatos de Catalunya y de España por equipos. Fuera, su grado de intimidad también es elevado y son frecuentes las visitas de Marc a la residencia de Rafa en Porto Cristo (Mallorca). Allá se sientan juntos para retarse en partidas a la PlayStation.

Nadal, como es sabido, es un acérrimo madridista, mientras que el barcelonés Marc bebe los vientos con pasión por el Barça. Hasta el punto de que si hay un clásico y no lo pueden ver juntos, lo que suele ocurrir, entonces se llaman por teléfono y se envían mensajes comentando el partido o lanzándose dardos el uno al otro en función de cómo haya ido el resultado en el Bernabeu o en el Camp Nou. En ese sentido no hablan el mismo lenguaje. En cambio, cuando forman pareja para un partido de tenis, sí. Lo hacen en catalán por costumbre y también como táctica porque consideran que así los rivales no les podrán entender cuando hacen algún comentario sobre la jugada.

Desde la constancia Marc se fue especializando en el dobles, modalidad en la que se ha convertido en uno de los mejores del mundo. Demostrando su habilidad y su estabilidad trabajando en equipo no sólo con Nadal, sino también con Feli López, con el que levantó Roland Garros este año, y con Marcel Granollers, pareja con la que conquistó el Masters en 2012. Ayer lo que lo logró es el oro olímpico, el sueño de su vida, y lo hizo junto a su amigo Rafa.

(Juan Bautista Martínez, La Vanguardia)